Durante el siglo XVIII en Inglaterra, el Partido Liberal era una coalición política libremente organizada, cuyos líderes políticos se oponían a cualquier tipo de autoridad arbitraria proveniente de la monarquía o de oficiales nombrados por el gobierno. Al igual que los panfletistas radical-liberales, los liberales se proclamaban defensores de la libertad, razón por la cual muchos líderes americanos, aunque no organizados como partido político, se auto-definían liberales. Durante los años 30 y 40 del siglo XIX en los Estados Unidos, existía un partido liberal que se oponía a las políticas de Andrew Jackson, Martin Van Buren y otros miembros del partido democrático.